miércoles, 28 de mayo de 2014

¿Libertad? ¿Qué libertad?



“¡Yo no he sido!”, repite una y otra vez el bueno de Bart Simpson. ¿Tendrá razón? ¿Somos realmente responsables (es decir: los autores o causantes) de nuestras decisiones y acciones? Veamos.

La mayoría de las teorías éticas suponen que los seres humanos somos seres o sujetos morales en cuanto (1) “PODEMOS ELEGIR”, y (2) “SOMOS LA CAUSA ÚLTIMA DE LO QUE ELEGIMOS”. Estas dos ideas están a la base de lo que significa la palabra “LIBERTAD” (al menos, en un sentido positivo, el sentido “negativo” de libertad –ausencia de obstáculos que impidan hacer lo que he decidido— es menos importante, en cuanto que depende del primero).

En efecto, las teorías morales no sólo incluyen enunciados descriptivos (del tipo “X es bueno”), sino también enunciados normativos o prescriptivos (“Debes hacer x”), por lo que presuponen que somos libres, es decir: que podemos ELEGIR x o no-x, y que somos NOSOTROS (y no las circunstancias ni nada no elegido por nosotros) lo que causa tal elección. Ahora bien: ¿es todo esto cierto?

De entrada, el supuesto de que podemos elegir es ya bastante problemático. Sobre todo si mantenemos una concepción rígidamente DETERMINISTA de la realidad de la que formamos parte. Si el mundo se describe como una compleja secuencia de causas y efectos regida por leyes (como una larga lista de fichas de dominó que se van haciendo caer unas a otras), no hay lugar para posibles cursos de acción alternativos al único que, según esa secuencia y esas leyes, puede ser. Me imagino ilusoriamente que puedo pasear por la calle A en lugar de por la calle B porque ignoro toda la secuencia y las leyes que determinan (lo sepa yo o no) el recorrido de mi paseo... Podría, desde luego, acudir a una concepción más indeterminista del mundo (como la que presenta cierta parte de la física contemporánea), o a la idea de que los seres humanos no pertenecemos del todo al mundo que describen las leyes naturales, pero ambas opciones parecen muy discutibles (lo primero supone que hay fenómenos imprevisibles y, por tanto, irracionales; lo segundo supone que los humanos somos seres "sobrenaturales").



Supongamos de todos modos que la elección fuera posible. Faltaría entonces por justificar lo más importante: ¿cómo que somos nosotros los responsables últimos de las elecciones que tomamos? Supongamos que Bart Simpson puede escoger entre devolver una cartera llena de dinero o no hacerlo. Para suponer que es libre (que es él, de forma autónoma, el que decide) hemos de ir más allá de las posibles CAUSAS BIOLÓGICAS (el instinto de posesión), PSICOLÓGICAS (una cleptomanía irrefrenable) y SOCIOCULTURALES (en el grupo cultural de referencia de Bart lo “guay” o adecuado es, supongamos, quedarse con el dinero). Si todo esto fuera lo que causa la elección de Bart, el responsable no sería él, sino la “especie” o el “entorno cultural” en que se ha educado. Esto es, por cierto, lo que dirían las "éticas naturalistas" o las que entienden la moral como la “ideología” de una determinada cultura.

Imaginemos ahora que Bart toma su decisión en función del PLACER que imagina va a proporcionarle quedarse con el dinero (o devolverlo), o que la toma pensando en que una sociedad en que la gente devuelve lo que encuentra es, en general, más FELIZ. Esta sería la respuesta que darían las éticas emotivistas (el hedonismo o el utilitarismo). Ahora bien, esto no resuelve el problema de la libertad, pues no parece que Bart, ni nadie, pueda elegir lo que le da placer o lo que le hace feliz. "A mi me gusta o me hace feliz esto, qué le vamos a hacer" -solemos decir-. (En todo caso, podríamos averiguar qué causas biológicas, psicológicas y culturales están detrás de lo que nos da placer o felicidad, pero no modificar estas relaciones causales).


Hay otra opción: que Bart decida en función de lo que le parece más RACIONAL (parecería racional, por ejemplo, que dado que todos los seres humanos somos iguales, no debemos hacer a otros lo que no queremos que nos hagan a nosotros). Ahora bien, aquí el problema es similar: nadie escoge que un argumento sea racional o no, por lo que Bart no tiene más remedio que escoger la opción que la razón le indica. Esta es la respuesta de las éticas más intelectualistas que, como vemos, tampoco justifican la responsabilidad personal (a no ser que identificamos a las personas con la razón) ni la libertad (la conclusión racional a la que llegamos tras argumentar no es una opción, ha de ser esa y nada más que esa).

¿Qué alternativa queda? ¿Obrar a CAPRICHO, porque nos da la gana, incluso contra nuestros impulsos emotivos o nuestra razón? Este tipo de respuesta es tan irracional que apenas merece la pena discutirla. Si ser libre es actuar por puro capricho o azar (si es que esto es posible), seríamos tan libres y responsables como un dado o una ruleta, es decir: nada (nadie diría que la ruleta es la que libremente ha decidido que salga el número 3, por ejemplo).



Así que, ¿libertad, qué libertad?... Ahora bien, SI NO HAY LIBERTAD, ¿HAY ALGUIEN QUE SEA RESPONSABLE O CULPABLE DE LO QUE HACE? ¿Qué solución cabría dar, entonces, a los que se portan “mal”?

8 comentarios:

  1. Acabo de llegar a una conclusion Víctor... La LIBERTAD NO EXISTE. Piensa en algo tan sencillo como los sonidos que emitimos cuando "hablamos", es una chorrada no? Como no van a ser libres esos sonidos no? Pues no son libres, estan aferrados por nosotros, son palabras secuestradas por el humano. Por eso creo que todo y nada es libre... Pueden ser mas liberales, pero nunca llega al grado de libre. (Esto por un lado)


    Y a lo realmente preguntas te podria contestar lo tipico de que aqui mandan los "peces gordos", etc... El sistema es el que hay y debemos acatar esa hipocreidad (nueva conjugacion jeje) en la que nos vemos y estamos envueltos...

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  2. Pienso que la libertad si exicte pero dentro de nuestras posibilidades, es decir, nosotros podemos elegir hacer una cosa u otra pero siempre sabemos que hay opciones que no son buenas y que no nos convienen. Entonces siempre vamos a elegir lo que mejor sea para nosotros y siempre vamos a ver lo mejor y a elegir lo que nos han enseñado desde pequeños, siempre vamos elegir lo que mejor es para nosotros y lo que nos enseñan.

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  3. La libertad existe y hay personas que la ejercen de buena manera y gente que la ejerce de mala manera. El problema es que las personas que la ejercen de mala manera en su gran mayoría no ven represalias en sus actos, debido a que tienen o ejercen demasiado poder en la sociedad.
    Pero yo creo que la libertad si existe , pero en parte está condicionada por las opciones que nos dan , ya que siempre hay opciones donde elegir que yo creo que en parte nos condicionan.

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  4. Si no tenemos libertad pienso que no somos culpables de las decisiones que tomamos seriamos culpables si tuvieramos la libertad de elegir por nosotros mismos entonces si no tenemos libertad nadie es culpable de lo que hace ya que no lo hace de sus impulsos sino del de otras personas
    En realidad las personas que se portan mal son las que inculcan mal es como si fueran las mas mayores lo que lo hacen los jefes lo que hacen eso entonces yo pienso que no se les podria castigar de ninguna manera.

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  5. Yo pienso que tenemos libertad pero que al mismo tiempo no, porque ponemos decir por nosotros mismo lo que queremos hacer hasta un cierto punto porque por una cosa u otra siempre te dejas influir por alguien y en ese momento es cuando ya pierdes un poco la libertad también es cierto que tu puedes decir si quieres dejarte influenciar o no por eso pienso que la libertad está sobre valorado que sí que existe pero a medias nose si me explico bien....
    Ivonne Loyola Jiménez

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  6. En mi opinión la Libertad (absoluta o total) no existe, es indiscutible que no somos totalmente libres hoy en día, estamos sujetos a prohibiciones,condiciones,manipulaciones.. que nos hacen esclavos de la sociedad en la que vivimos y por la que yo creo que sólo con la cultura/sabiduría podemos obtener lo que yo creo que es "La libertad parcial", es esa que a pesar de todo, de la manipulacion/influencia posiblemente tenida en la infancia por lo inculcado sin nuestra voluntad y que nos hacen ser como ya he dicho esclavo, podemos cambiar aprendiendo, cambiar a lo que realmente queremos, a cómo queremos ser que entonces eso sería libertad al igual que poder defender nuestras "nuevas" creencias. Es algo complicado tratar este tema y finalizando mi comentario, somos parcialmente libres de decidir los detalles de nuestra vida.

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  7. La libertad si existe, atendiendo a nuestras costumbres, todos tenemos la libertad de escoger entre varias opciones aunque podamos equivocarnos.. los que escogen opciones como violar, asesinar.. para mi eso ya es cuestión de que en el mundo hay buenas y malas personas y los que hacen eso es porque son malas personas.

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  8. Yo pienso que la libertad sí existe pero esta libertad no es del todo ''total'' porque estamos sujetos a miles de condiciones en nuestra actuación, a miles de normas o reglas y condicionados por el entorno y la sociedad donde nos hemos educado. Son estas reglas mediante las cuáles se castiga a los que obran mal, que cierto es tienen libertad de obrar pero saben que si obran mal...Por eso yo creo que no es una libertad total al 100%.

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